Tienes un mensaje...

Al cabo del día recibimos montones y montones de mensajes:

- Diez o doce de Infojobs, los primeros que abrimos y contestamos cada mañana con la misma ilusión que responderíamos a un antidisturbios.

- Otros tantos que, amigablemente, nos informan de los múltiples recortes que (ahora que no es euro todo lo que reluce) vamos a padecer.

- Un par más, imantados en el frigorífico, para que repongamos la leche, el ketchup, la paciencia o cualquier otra cosa que se nos haya agotado durante la semana.

- El aviso oloroso que nos recuerda que el pañal del bebé y algún que otro cargo político necesitan ser cambiados.

- Varios en el buzón que dejamos que abra nuestra pareja porque por el membrete del banco sospechamos que van a acabar embargándonos enojosas emociones o, peor, embargándonos sin emoción alguna.

Así, podríamos continuar hasta aburrirnos en nuestro primer post, y no es eso lo que pretendemos.

A lo que vamos..., hemos perdido la ilusión por leer los mensajes, con lo que disfrutábamos en la infancia cuando encontrábamos una nota arrugada escondida subrepticiamente en la mochila por una mano ajena, una dedicatoria sorpresa en la carpeta llena de tachones. Ahora, vemos un sobre y echamos a correr, leemos un e-mail y, como mucho, nos lo pasamos por el foro.

¿OS SUCEDE TAMBIÉN A VOSOTROS?

Pues por eso, porque estamos hartos de mensajes que nos amargan el día, hemos decidido abrir este espacio en la red. No pretendemos globarizaros ni blogarizaros. Si acaso aspiramos, como mucho, a ser el Blog Esponja de vuestros mensajes de aliento, el soporte de quién nos soporte, para ayudaros a comunicar a vuestros seres queridos o a vuestros íntimos enemigos algo original que no les espante demasiado desde el principio.

Y, ¿dónde estampamos la dedicatoria? Descuidad, que ya se nos irá ocurriendo, porque nuestros mensajes no se autodestruirán después de ser leidos ni provocarán el ansia de matar al mensajero; se quedarán en la sonrisa del que los recibe y volverán a aparecer cada vez que los relea.

Así que, para animar el cotarro, aquí van los primeros mensajes que podéis regalar a quién estiméis merecedor de ello:

Si os gusta alguna de nuestras tarjetas, pedidnos el archivo y os lo enviamos por mail. Por favor, que no se quede ningún padre sin su felicitación.